De manera simultánea con agrupaciones de Colombia, Chile, Argentina, Brasil y España, manifestantes en México, protestaron frente a la embajada nicaragüense para crear conciencia de lo que está sucediendo en aquel país, hacer visibles las injusticias y el cómo la izquierda busca privar de las libertades a los ciudadanos.
La Fundación Patria Unida levantó la voz por los que no pueden hacerlo. “Exigir libertar de culto para los oprimidos por el régimen totalitario de Nicaragua. Siempre denunciando la injusticia y la privación de las libertades. Recordándole al pueblo de Nicaragua que la soberanía reside en ellos no en el dictador al mando del régimen totalitario”, afirmó Alice Galván Presidenta de Patria Unida.
Añadió que el protestar de manera pacífica es una forma de solidarizarse con la Iglesia reprimida, silenciada y sitiada de Nicaragua. Sin embargo, resaltó que el enemigo no es la Iglesia, ni la libertad de culto, el enemigo es la violación de derechos y libertades que hacen los regímenes totalitarios.
Galván cuestionó al gobierno de Andrés Manuel López Obrador el apoyo que brinda a Ortega: “exigimos al gobierno mexicano que deje de ser cómplice y tapadera del régimen dictatorial y tiránico de Daniel Ortega. Vemos con indignación cómo el gobierno mexicano se ha convertido en aliado incondicional del gobierno nicaragüense en los diferentes organismos internacionales, lo cual nos llena de vergüenza y oprobio”, denunció.
Agregó que el régimen totalitario quiere callar las voces de quienes denuncian sus atropellos, pero Patria Unida será su voz en contra del régimen. “Millones de nicaragüenses no pueden participar en procesiones, festividades ni celebraciones eucarísticas; decenas de sacerdotes y obispos han sido agredidos y detenidos por la policía y el ejército.
Patria Unida seguirá siendo la voz de todos aquellos que creemos y defendemos la libertad de culto. De aquellos que estamos en contra del dictador Daniel Ortega, quien lleva 15 años en el gobierno y no acepta a quien piensa diferente y hoy ha llegado a la censura y represión, en concreto de la Iglesia Católica.
Resaltar que, de manera simultánea, en Colombia, Chile, Argentina, Brasil y España se realizaron en las embajadas de Nicaragua protestas pacíficas para exhortar y presionar al gobierno de Daniel Ortega que cese la persecución católica.
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