Gracias a datos del INEGI, sabemos que más del 75% de empresas en el país suelen desaparecer después de los primeros 7 u 8 años de vida, esto se debe en gran medida a una falta de orientación en su creación y poca visibilidad.
La desaparición y cierre indiscriminado de empresas puede explicarse por diversos fenómenos, sobresaliendo principalmente la falta de planeación de los elementos de las marcas. Una marca es el conjunto de atributos más valiosos de una compañía, esta no solo le da una personalidad sino que se vuelve la voz, imagen y valores representativos en todos los aspectos de las empresas.
Hoy por hoy nos encontramos en un mundo donde contar con un branding adecuado deja de ser un lujo para las marcas y se convierte en un must del cual puede llegar a depender la rentabilidad, credibilidad y crecimiento del negocio tanto en el interior como en el exterior, siendo un ejemplo de ello que hasta el 94% de los clientes tienden a ser leales a las marcas que les ofrecen honestidad, teniendo así ingresos con mayor flujo, relaciones más reales con las audiencia, confianza y lealtad.
Conociendo la importancia de contar con una estrategia al crear un negocio y sabiendo que el éxito de este no puede dejarse al azar, expertos de Comint, agencia de branding especializada en humanizar marcas nos platican cuáles son los elementos más importantes para tener un negocio más rentable y longevo.
Autenticidad: El mundo ha cambiado y es importante reconocer que hoy en día las marcas, así como los humanos, cuentan con personalidad auténtica que les permite crear un antes y un después para transmitir sus mensajes de manera honesta, conectando mediante vínculos estrechos con sus audiencias.
Adaptabilidad: Nuestro entorno suele cambiar más rápido de lo que creemos, las nuevas tendencias, hábitos y prácticas suelen ser un factor común que se “come” a las marcas y es que, el no estar preparadas ante nuevos retos puede ser la punta del iceberg de un negocio fallido. Conocer el mercado y cómo va cambiando puede ayudar a las pequeñas y medianas empresas a sobrevivir en un entorno cada vez más competido.
Integridad: Para que una empresa triunfe es muy importante tener coherencia entre lo que se dice y lo que se hace, refiriéndonos principalmente a los valores del negocio ya que estos serán un “sello” para saber respetar lo que la marca representa, siendo esto un gran diferenciador para impulsar las motivaciones auténticas de la empresa, aquello que los mueve y los hace seguir adelante.
Identidad: La identidad gráfica como el logo, colores, tipografía, y nombre de una marca es un factor completamente necesario para tener un negocio sólido ya que esto coadyuva con la recordación y permite a las empresas ser recordadas, queridas y valiosas. Un nombre para recordar siempre es mucho más fuerte que ser dejado en el olvido.
Centrada en el humano: La manera en la que nos comunicamos ha evolucionado radicalmente, ya que en la actualidad las personas buscan una comunicación más humana y realista, para las marcas no es diferente ya que estas deben conectar de manera transparente con sus audiencias, haciéndolos sentir escuchados y parte de una comunidad. Las marcas humanas han llegado para romper paradigmas en el mundo del MKT, acercándose a sus públicos de manera empática, honesta y con deseos de escuchar (realmente) lo que los compradores tienen que decir ya que hasta 79% de los consumidores dice que quiere que las marcas demuestren que son importantes para ellos de acuerdo con el estudio de Wunderma.
Hacer que un emprendimiento sea factible, real y redituable requiere de mucho esfuerzo, organización y planeación estratégica. Para hacer de esto un “sueño hecho realidad” es vital contar con una marca sólida, honesta y transparente que nos permita ser más humanos y auténticos.
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