Robo oficial de propiedad privada

 


Con su pretensa Constitución quiere imponer la dictadura

Por Luis Repper Jaramillo*

lrepperjaramillo@gmail.com

“Seguirá la corrupción” en el segundo piso de la Transformación, lacró (dañar, contagiar, perjudicar a alguien -los mexicanos- una enfermedad -perversión-), adelantó lagartija pestilente #Es Claudia, en cualquiera de sus mensajes, ahora, que perversamente busca ganar la elección presidencial del 2 de junio. Lo que impediremos con nuestro voto los mexicanos dignos, bien nacidos, demócratas, decentes.

Además de corrupto, incapaz, perverso, vil, narco, népota, sinvergüenza, violador serial -diría consuetudinario (que hace las cosas por tradición, costumbre) de la Constitución, de las leyes, reglamentos, promesas, de su palabra, etc. Andrés Manuel López Obrador es Traidor a la Patria; pero no sólo él, sino el séquito, larvas, corifeos, gusanos que lo secundan, obedecen, larvean, acatan, zalameros y más, que forman la Transformación de 4ª, gabinetes legal y ampliado, gobernadores, diputados -locales y federales-, senadores, presidentes municipales de filiación guinda, o sea Morena, PT, Verdes, pues a pesar que padecen, conocen, saben el Estado catastrófico  en que López Obrador ha sumido al país, aún aspiran a seguir (des) gobernando 6 años más, pese a ser antidemocrático, atentar contra el Estado de Derecho, la moral, ética y agresión a la Nación.

Y lo peor de esto, la descerebrada, corrupta, asesina doloso/culposa (53 muertos, entre ellos 19 niños), inepta, tramposa, antinacionalista (fortuna de ella y su familia se encuentra en paraísos fiscales, “es un dinerito que tiene guardado mi mamá en Panamá” , dijo la cínica, en donde se “lavan” millonarias fortunas, que evaden en México pago de impuestos, fuga de dinero, capitales golondrinos, etc. delito fiscal, como la de su madre Annie Pardo Cemo), razón suficiente para desconocer la candidatura.

Pero lejos de ello, insiste que seguirá la corrupción a través de la construcción del segundo piso de la transformación.

Esto significa que, como Andrés Manuel no logró en 6 años de fracasado sexenio, Sheinbaum se compromete ante su mesías seguir ciegamente lo que el tabasqueño no supo, no pudo o no lo permitimos los mexicanos biennacidos, imponer la dictadura en nuestro democrático país que legal y legítimamente lo ungió como el 63er Presidente de México.

Sin embargo, una vez en Palacio Nacional, traiciona el voto y confianza de 30 millones 104 mil chairos, pejezombies, amlovers, dando un giro de felonía que llevar a la Nación por el camino de la tiranía.

Para ello ha cometido a lo largo de 2005 días y contando, idioteces, corruptelas, complicidades con la delincuencia organizada. Ha permitido e ignorado que sus socios y “cuidados”: sicarios, asesinos, gatilleros, gavilleros, etc. cometan más de 190 mil homicidios dolosos.

Ya de salida (afortunadamente) del sexenio (malo y asesino, por cierto) pretende aniquilar, destruir, desaparecer el Poder Judicial (SCJN, CJF, Jueces y Ministerios Públicos de la Federación) para controlar absolutamente el Estado.

Se atrevió el traidor, soñar, imaginar, idear, maquinar, escribir y proponer una nueva Constitución para los Estados Unidos Mexicanos (desconociendo la actual) a la que en 2006 “mando al diablo”, erigiéndose en presidente legítimo, de su República Amorosa.

Este intento por impulsar “su” constitución, con estilo, sello, imaginación, ilusión, perversidad, inmoralidad, demencia López Obrador, es un intento por desaparecer las garantías individuales, el Estado de Derecho, la democracia, la propiedad privada, el derecho al voto, el Pacto Federal, los 3 Poderes de la Unión: ejecutivo, legislativo, judicial, para imponer la figura y decisión de un solo hombre: él, como guía, líder, dictador.

A propósito, en su mamotreto constitucional cuyo beneficiario (así lo ideó) sería Andrés Manuel López Obrador, no los 130 millones de mexicanos, hay un capítulo que no tiene madre. Se refiere al derecho de propiedad privada (casa, terreno, parcela, departamento, edificio, ejido, hectárea, comunal, condominio, morada; es decir, bienes muebles e inmuebles particulares), con dueño, propietario, poseedor avalado con escrituras, planos, documentos oficiales, etc. Usufruto de toda una vida de trabajo, esfuerzo, dedicación, un hogar (en su amplio significado), producto del trabajo y su recompensa: el salario, ahorros, prestaciones, etc. López Obrador quiere robárselo.

Sí, quitándonos a la mala, a través de su perversa constitución, al modificar los términos de la actual propiedad privada, reclasificándola por concesión.

Así, cínica, desvergonzadamente, el Presidente de Morena, Mario Delgado Carrillo, detalla esta amenaza en “su” constitución lopezobradorista (ponga atención a lo que pretende el Peje): “a partir de nuestra nueva constitución y de acuerdo con la visión del presidente López Obrador, la propiedad privada dejará de serlo, para convertirse en concesión. Para que quede claro, presume Delgado Carrillo, toda la propiedad privada del país, pasa a manos del Estado” 

El actual poseedor de una vivienda, de aprobarse esta idiotez de la T4a, se convertirá sólo en concesionario -no más dueño- y si la autoridad lo decide, como toda concesión, tiene la facultad de revocar el título y tomar posesión del inmueble, insiste Mario Delgado.

El concesionario, si así lo decide, puede vender el inmueble, y cederlo bajo la denominación legal de traslado de dominio; pero… fanfarronea el morenista, “al entrar en vigor la nueva constitución, desaparece el término traslado de dominio, porque este plenamente lo aplica a su favor la autoridad federal de todos los terrenos, casas, departamentos, edificios, ranchos, etc. Ya está bajo el control del gobierno” Woow. Esto sencillamente se llama desojo, robo, pillaje, saqueo de la T4a, Morena, PT, Verde, gobierno federal.

Amplía el dirigente nacional de Morena la neo disposición sobre la propiedad privada, ahora, concesión: “si tienes una propiedad, dejarás de llamarte dueño y te conviertes en concesionario, no poseedor del bien; porque la propiedad pasará a manos del gobierno. Ya no venderás la propiedad, sino la concesión y esta es revocable, si así lo decide Ya sabes quién.

En pocas palabras, tu concesión y si eres antipeje, T4a, simpatizas con la oposición, no coincides con las tonterías, decisiones, ideas o gobierno guinda, tu casa estaría en riesgo. La podrían decomisar, quitar, despojar.

Según el último censo de vivienda del INEGI (2020) en México existen 35 millones 300 mil casas/habitación, de las cuales el 70% son propiedad privada; es decir, 24 millones 500 mil familias son dueñas del inmueble, a los que Andrés Manuel López Obrador, con su perversa neo constitución, pretende despojarlos, quedarse con ellas bajo el régimen de concesión.

Ahora bien, para evitar que este corrupto, inepto, soberbio, egocéntrico, esquizofrénico, mal nacido, etc. logre su objetivo, sólo nosotros: usted, yo, su vecino, familiar, amigo, conocido, etc. tenemos la solución, muy sencilla; pero requiere decisión, razonamiento, convencimiento, amor a México, defender la democracia, el Estado de Derecho, nuestras libertades, obligaciones, rescatar al país de las garras de un dictadorzuelo de pacotilla.

¿Qué es ese sencillo paso? Se llama voto. El domingo 2 de junio, en la jornada en que elegiremos presidente de la república, diputados federales, senadores, 9 gobernadores, congresos locales, gobierno de la CDMX y su cámara de diputados, etc.  los mexicanos bien nacidos, demócratas, dignos, honrados, éticos, morales, debemos abarrotar con disciplina, orden, disponibilidad las casillas electorales en donde en la intimidad de la mampara, en esos 300 segundos en donde marcaremos el partido y candidatos que nos den certeza, confianza, seguridad, recapitulemos los últimos 6 años del desastroso gobierno de Andrés Manuel y las consecuencias que padecemos. No demos oportunidad que sus aspiracionistas, entre ellos Claudia Sheinbaum, lagartija pestilente, los candidatos a diputados federales y senadores de Morena, PT, Verde Ecologista, ni el pretenso presidencial de MC, Jorge Álvarez Maynez, obtengan “algunos” votos.  Sufraguemos en favor de la opositora del PAN, PRI y PRD, Xóchitl Gálvez, para impedir que gane Sheinbaum y los ofertados a San Lázaro y Reforma 135, que obtengan mayoría -ni simple-, de lo contrario estaríamos dándonos el harakiri.

Esto es, en el hipotético caso del triunfo de López Obrador (Claudia Sheinbaum) y de sus títeres al Congreso de la Unión que buscan la mayoría, el engendro de dictador estaría en posibilidad de echar a nadar “su” constitución que contempla lo descrito líneas arriba: desaparece la propiedad privada.

Este es sólo un ejemplo de lo que este monstruo antidemocrático pretende hacer a través de lagartija pestilente, porque ella no ejercería el Poder Ejecutivo, sino Andrés Manuel.

El otro riesgo, que el tabasqueño maquina, en colusión con sus potenciales diputados y senadores oficialistas, es desaparecer el Poder Judicial, único contrapeso legal y político que protege la Constitución, soberanía, Estado de Derecho, democracia, garantías individuales, derecho al voto, nacionalidad, ciudadanía y a la Patria de un desquiciado mental.

El voto, razonado, decidido y consciente en favor de México y los mexicanos es el de usted.


*Colaborador de los Grupos Editoriales Digitales bajosello.org, endirecto.mx, lagacetametropolitana.com, algrano.mx, entresemana.mx, metropolihoy.com

 


  



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