Etelvina Sandoval Flores —integrante de la junta directiva de la Comisión Nacional para la Mejora Continua de la Educación (Mejoredu)— destacó que después de la pandemia es necesario pensar en una escuela renovada que se constituya como un espacio de justicia afectiva, democrático, equitativo, participativo, flexible e inclusivo.
Señaló que, si bien durante la pandemia las y los docentes desplegaron acciones para motivar la continuidad escolar de niñas, niños, jóvenes y adolescentes, aún se requiere valorar el impacto de la desafiliación escolar en la educación básica y media superior.
Precisó que ante cambios importantes como el Plan de Estudios de la Educación Básica 2022, se está en posibilidad de optar por una educación que incorpore en el currículo escolar nuevas formas de aprender, de entender el mundo y que cuente con una base formativa común abierta a discusiones locales y regionales.
Consideró que este nuevo tipo de escuela y educación implican repensar la formación docente como un proceso continuo de aprendizaje; centrada en saberes disciplinarios y pedagógicos; situada y racional; sensible y flexible, y vinculada con la escuela y los actores escolares. También propuso construir una agenda conjunta para la formación de maestros que parta de la realidad docente y de las escuelas, y establecer nuevas perspectivas de formación docente más allá de visiones centralizadas e individualistas.
Luego de informar que Mejoredu concibe a la formación continua como un proceso de larga duración que contribuye al desarrollo profesional docente, Sandoval Flores propuso rutas para repensar la formación inicial de las y los maestros, entre ellas: propiciar una transformación curricular colectiva que involucre tanto a tomadores de decisiones como a los docentes, y propiciar la corresponsabilidad de los tres niveles de gobierno, de modo que ello permita definir de manera conjunta el tipo de profesional que requiere el Sistema Educativo Nacional.
Ante la pregunta ¿Qué profesional de la docencia formar? Respondió que es necesario contar con docentes comprometidos con su labor; críticos y analíticos del mundo; profesionales y que trabajen con los saberes de los estudiantes y promuevan una evaluación diagnóstica, formativa e integral. Se trata de formar docentes para el cambio y para construir la educación que queremos junto con los estudiantes, las familias y las autoridades”, finalizó.
0 Comentarios